Muchas veces la palabra Merecimiento no la tenemos presente en nuestras vidas, estamos más acostumbrados a normalizar lo negativo compartiéndolo en la cotidianeidad, y no a priorizar lo que merecemos.
Porque solemos poner el foco en los guiones dolorosos o conflictivos y valoramos muy poco cuando algo agradable sucede en nuestras vidas.
La clave está en crear un balance, y no alojarnos en un extremo.
Inés BogDiM
A veces priorizarnos, puede tomarse como egoísmo. Pero déjame decirte que valorarte, dedicarte tiempo para ti, e ir tras tus sueños, elevar tu autoestima, o cuidar tu energía es parte del merecimiento, es parte de dar lugar y aceptar con total consciencia de que te mereces lo mejor para tu vida, que mereces relaciones sanas, armónicas, de que te mereces tener momentos felices.
Ya que nadie puede dar nada bueno, si primero no está bien consigo mismo.
Entonces, es necesario darnos cuenta de las limitaciones que vamos adquiriendo a lo largo de la vida en forma inconsciente, pero también es nuestro deber trascender esas limitaciones, para vivir lo que de verdad merecemos en nuestra vida, y no estar en piloto automático con patrones de miedo, tristeza, negatividad y demás.
Es nuestra responsabilidad reconocer nuestro potencial, no autosaboteranos desvalorizándonos de que no sabemos, no podemos, o de que no somos suficientes. Hemos venido a la vida a aprender, si, pero hemos venido a amarnos, a valorarnos, a reconocernos como seres grandiosos, a nutrir nuestra alma y principalmente a aceptarnos tal como somos.
Debemos abrir nuestro corazón y nuestra mente para reconocer lo bueno y lo maravilloso que la vida tiene para nosotros.
Aceptar el merecimiento es aceptar la prosperidad en todo sentido, no solo en lo económico. La prosperidad en todas las áreas de nuestra vida, desde lo más simple hasta lo mas complejo.
A veces se cree que solo se relaciona con el dinero, pero no es así, la prosperidad comienza en nuestro interior, de sentirnos prósperos incluso por poder tomar una ducha o poder dedicarnos un momento de silencio y descanso, sin que la culpa nos juegue una mala pasada.
Sí, la culpa. A veces se escabulle entre medio del merecimiento y la prosperidad, porque?, bueno precisamente porque nuestras creencias inconscientes ponen una barrera para dar un alto y decirnos, esto no es para mi o no soy buena o eso solo le pasa a otras personas pero no a mi porque no soy capaz.
Y no; esas creencias que te detienen, que te llevan a desvalorizarte, a limitarte, o a que la prosperidad se escape de tus manos sea del área que sea, o a que no veas las cosas buenas que te suceden porque te las mereces.
Ellas están ahí para que tu aprendas a identificarlas, trascenderlas y así poder crecer en alma y consciencia.
Te propongo un ejercicio:
En una hoja y escribe una lista de las cosas diarias y cotidianas que tomas como seguras de que siempre están ahí, de que han estado o estarán. Puedo asegurarte de que muchas de las que escribas, hay personas que ni siquiera las tienen. Y agradece cada una de ellas, agradece que a partir de ahora las verás con mas atención valorndolas.
“En las cosas o situaciones sencillas, pequeñas y cotidianas de la vida, es donde comienza la Prosperidad”.
Inés BogDiM
Ser honestos con nosotros mismos es el principio del camino para nuestra transformación hacia una mirada de merecimiento y prosperidad.
Todos nos merecemos lo mejor, no hay excepciones, pero está en nosotros aceptarlo con consciencia, amorosidad y dejar que fluya lo que la vida tiene para darnos, sin que nuestro ego se interponga con peros o culpas.
Es necesario atreverse a tomar un camino diferente de lo que se está acostumbrado, para entrar en armonía con el Ser y con lo que realmente has venido a vivir.
¿Te gustaría comenzar ahora mismo a generar cambios en tu vida?
Te comparto el tratamiento de merecimiento de Luoise Hay, para que ya mismo comiences:
- Crea un cuadro y tenlo visible, de esta forma, podrás recordarte en cada momento el Merecimiento.
- También puedes grabarlo y escucharlo mientras duermes.
Tratamiento de Merecimiento
Yo soy digno y merecedor de todo lo bueno.
No solo de algo o un poquito, de TODO LO BUENO!!
Ahora dejo atrás todos los pensamientos negativos y restrictivos.
Abandono y olvido las limitaciones del pasado, de mis padres y de la sociedad en que vivo. Los amo y voy más allá de ellos.
Para nada me identifico con limitaciones de alguna clase.
En mi mente gozo de libertad absoluta.
Penetro ahora y me muevo en un nuevo espacio de conciencia, en donde me veo de forma diferente. Constantemente creo pensamientos nuevos sobre mí y sobre mi nueva vida. Estoy creando nuevos pensamientos acerca de mi ser y de mi vida.
Mi nueva forma de pensar se convierte en experiencias nuevas.
Ahora sé y afirmo que soy uno con el próspero poder del universo.
Ahora prospero de múltiples maneras.
La totalidad de posibilidades se abren ante mí.
Yo
Merezco la vida, una buena vida.
Merezco amor, abundante amor.
Merezco tener buena salud.
Merezco vivir cómodamente y prosperar.
Merezco la alegría y la felicidad.
Merezco la libertad de ser todo aquello que soy capaz de ser.
Merezco más que eso… Merezco todo lo bueno.
El Universo está más que dispuesto a manifestar mis nuevas creencias
y yo acepto esta abundancia de vida con júbilo, placer y gratitud.
¡Porque lo merezco! Lo acepto y sé que es verdad.
Sabiendo que soy merecedor de todo esto, lo acepto aquí y ahora.
Así es!
Louise Hay
Agradezco que hayas transitado por aquí y espero que regreses muy pronto. Bendiciones Infinitas para Ti !!
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